domingo, 6 de agosto de 2017

De la literatura deficitaria

Que la literatura es un negocio ruinoso lo he dicho mucho en este blog, pero es dolorosamente cierto. Digamos que escribes una novela, la presentas a un concurso y ganas un premio de seis mil euros. Un millón de pesetas, en principio está bien. Luego haces unos simples cálculos y descubres que es como si hubieras trabajado ocho meses por el sueldo mínimo (setecientos euros ahora mismo). Sale rentable si has tardado menos de ese tiempo en escribirla, pero si te ha llevado más... Un capitalista diría que tienes que aumentar el ritmo de producción, aunque entonces puede que se resienta la calidad y la idea es que te premie un jurado (estamos aquí teorizando sobre concursos limpios). No parece que se pueda vivir de los concursos, por tanto. Quedan los lectores, pero en España no lee casi nadie de forma habitual. A veces se produce algún fenómeno literario que vende cientos de miles de ejemplares, quizá habría que dedicar tres meses de cada año a intentar escribir algo así (con seudónimo) y los nueve meses restantes entregarte a la literatura deficitaria que tanto te gusta.

1 comentario:

Microalgo dijo...

¿Escribe usted OCHO HORAS diarias?

(Dejo su respuesta en el aire para discutirla un día frente a unas cervecitas).