miércoles, 26 de octubre de 2016

Idea para un corto de terror

Interior, noche. Un niño duerme en su habitación. De pronto, oye unos pasos en la oscuridad. Abre el cajón de su mesita de noche, saca una linterna e ilumina con ella el lugar de procedencia de los pasos. Vemos a un negro con frac, sombrero de copa y guantes blancos que mira a la cámara, pone manos de jazz y dice: ¡Boogaloo!

1 comentario:

Microalgo dijo...

Peor si fuera Pitingo.