lunes, 1 de junio de 2015

El espía

En busca de inspiración, me llevo el portátil al comedor. La ventana da a un patio interior; en concreto, está justo frente a una ventana por la que se puede ver el pasillo del edificio, permitiendo espiar el trasiego de vecinos. No es muy evocador que digamos a la hora de escribir, pero sí indiscreto.

1 comentario:

Microalgo dijo...

¿Que no? La cantidad de historias interesantes que se puede uno imaginar viendo pasar a los vecinos. Intrigas, venganzas, asesinatos, incestos, perversiones. Mucho mejor que sus vidas reales, dónde va Usted a parar.