lunes, 19 de septiembre de 2011

Derecho de admisión

Eso de ahí es la puerta del Parnaso y lo que hay junto a ella es el portero, que no tiene mi nombre en su lista, a pesar de que yo juro y perjuro que merezco entrar, que se celebra una fiesta en mi honor, una fiesta secreta, tan secreta que no lo sabe nadie, ni siquiera los invitados.

1 comentario:

Microalgo dijo...

Cuélese por una ventana. Es lícito, mientras no le pillen.

Felicidades, a todo esto.