martes, 11 de mayo de 2010

El partido

—Un grupo de prehistoriadores ha confirmado que primero fue la nada —informa el presidente del partido en la reunión de cada año—. Esa nada a la que volvemos a paso de gigante porque no gobernamos nosotros.
—Habrá que hacer algo —proclama el líder de las juventudes del partido—. Engatusar a los ciudadanos para que nos voten a nosotros, que conduciremos el país por la senda correcta de las buenas costumbres y los valores del pasado. Hacia adelante con la mirada puesta atrás, ése ha de ser nuestro lema.
—Todo está ya inventado —responde una política de mediana edad—. Haría falta una campaña novedosa para llamar la atención y destacar entre tanto anuncio de bebidas refrescantes, coches y detergentes del futuro.
—Podríamos prometer recortes de impuestos para los que se afilien a nuestro partido —propone el líder juvenil—. Apelemos al egoísmo de la gente, que se afiliará por si acaso ganamos.
—Si ganamos, también podríamos deportar a los afiliados de otros partidos —se anima el presidente.
—Quizá sería pernicioso para la economía —arguye un señor con gafas.
—Con esa actitud tan negativa no vamos a ninguna parte —replica el presidente.

No hay comentarios: