viernes, 22 de agosto de 2008

Capítulo 1461

Llegar a casa en un estado de embriaguez absoluta y sentarse en la terraza a escuchar el sonido que producen los neumáticos de los coches (los pocos que pasan a esta hora) al deslizarse sobre el asfalto. Como quien se sienta a escuchar las olas del mar.

No hay comentarios: