domingo, 13 de enero de 2008

Bufón

Qué agotador es hacer reír a las chicas. Y la recompensa apenas cubre las mínimas necesidades vitales. "Nadie me hace reír tanto como tú", me dice A. antes de marcharse a casa, que su marido espera. Yo me quedo en la plaza con las palomas, que me miran con ojos bobalicones. Je.

No hay comentarios: