jueves, 1 de abril de 2004

Fotofobia

El señor Hans salía tranquilamente de su casa cuando, sin previo aviso, el sol se abalanzó sobre él y le devoró. La gente del pueblo estaba consternada. ¿Por qué se había convertido el sol en un asesino antropófago? Nadie podía estar tranquilo fuera de su casa. ¿Cuándo volvería a atacar el sol? Como vampiros, aprendieron a temer al sol y anhelar la noche. Durante el día las calles permanecían desiertas y las persianas bajadas. Al llegar la noche, se abrían los comercios y la gente paseaba por las concurridas calles del pueblo. Los niños corrían de un lado a otro y reían porque estaban a salvo del sol.

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